(Paul Monzón).- Decía Séneca, filósofo, político, orador y escritor romano, que «No hay bien alguno que nos deleite si no lo compartimos». Sin lugar a dudas es una cita indispensable cuando al hablar de solidaridad para con el prójimo se trata. Este sentimiento, nacido en este «lado del charco», empezó a tomar forma tras el potente terremoto que devastó Haití el 12 de enero del 2010, y donde -según se supo un año después- fallecieron 316.000 personas; 350.000 resultaron heridas, y más de 1,5 millones se quedaron sin hogar.
Tras el cataclismo haitiano un grupo de trabajadores de Air Europa, compañía aérea del Grupo Globalia, ante el urgente pedido de ayuda internacional que semejante tragedia demandó, no dudó en aportar su granito de arena para paliar el hambre y necesidades que el movimiento telúrico provocó.
Y es así que manos a la obra organizaron una colecta cuyo monto final fue destinado a los más necesitados de la catástrofe del país caribeño.
Concientizados de la problemática que no sólo se vivía entonces en el país centroamericano, sino de la precariedad de vida que impera en otros puntos de Iberoamérica, se animaron a extender su radio de solidaridad para lo cual tuvieron que organizarse.
Así nació AEA Solidaria (Asociación de Empleados de Aeronáutica) cuyos miembros principales son Marta Andreu, Isabel Ximelis y Marta Ríos, entre otros muchos trabajadores de Air Europa, compañía aérea que pertenece al Grupo Globalia, y que colaboran desinteresadamente en esta loable acción social.
La educación de los niños es uno de los pilares de este proyecto solidario
Los principales cometidos de AEA son cubrir las necesidades básicas de niños en estado de orfandad, (o en situación de exclusión social), tales como educación, alimentación y sanidad.
Esta asociación sin fines de lucro viene trabajando en República Dominicana, y en Bolivia (a través del Hogar de Niños de Santa Cruz) países en los cuales cubre necesidades materiales, pero también educativas.
Aprovechando la coyuntura de los vuelos de Air Europa (que tiene trayecto directo a ambos destinos) el material y la ayuda necesaria llega sin contratiempo. Pero ellos valoran más el tiempo y afecto que se les brinda antes que el aspecto material.
En septiembre del año pasado se proyectó en Mallorca el documental “Sueños que vuelan” el cual revela a través de pequeñas historias y testimonios personales los pasos seguidos por AEA Solidaria en esta cruzada de solidaridad.
El mundo de la cultura española también quiso arrimar el hombro y es así que en marzo del 2016 Jaime Anglada, cantautor, actor y presentador de televisión y embajador de AEA solidaria, junto con Carolina Cerezuela, actriz, y presentadora de televisión, viajaron a República Dominicana y tras visitar el barrio de Los Cocos, uno de los más desfavorecidos de Boca Chica, se sumaron al trabajo que AEA Solidaria desempeña para garantizar las necesidades básicas de los niños que viven allí, y tuvieron el gran gesto de dedicarles una canción titulada “El lápiz está en tus manos” (Ver vídeo)
Testimonios
Marta Andrea, Presidenta de AEA Solidaria, en declaraciones a Canal 4 de Mallorca, recordó los inicios de esta novel ONG: “Siento un orgullo enorme hasta donde hemos llegado desde nuestros comienzos “
Marta Andreu, Presidenta de AEA Solidaria
“Nosotros -agrega- empezamos en Haití. A las tres semanas del terremoto hacíamos nuestra primera intervención, aprovechamos los vuelos a República Dominicana de Air Europa para llevar material de primera necesidad. A las tres semanas estábamos caminando por las calles de Puerto Príncipe sin saber cómo y de qué manera, pero estábamos allí».
Para ella, ser testigo directo y ver las imágenes de la tragedia in situ, fue una de las razones que la decidieron a involucrarse en esta acción humanitaria que ha emprendido junto a compañeras de Air Europa
“Las imágenes que pudimos ver todos en la televisión, y que golpearon nuestra conciencia desde el minuto uno, fue el pistoletazo de salida”, señala.
Pone énfasis en resaltar la importante colaboración de Air Europa que las ha apoyado en todo momento.
“Cuando hablamos con la Dirección General y le contamos los proyectos que habíamos hecho, lo que teníamos por delante, nos dijeron que ellos querían formar parte de toda esta aventura. Y a día de hoy, gracias a Air Europa tenemos las bodegas de los aviones para poder llenarlas de ayuda humanitaria”
Isabel Ximelis, del equipo de Marketing de Air Europa, cuenta así sus inicios en AEA:
Isabel Ximelis
“Yo conocía a Marta Ríos y un día ella me dio un toque de atención porque necesitaba recolectar dinero para una causa, y como yo trabajo en el departamento de Marketing de Air Europa, y en Llucmajor somos muchas personas, entonces decidí hacer la colecta»
«Recolectamos muchos dinero. Entonces Marta me dijo, “¿Por qué no te vienes a Santo Domingo y conoces parte del proyecto en el cual te has involucrado?”
Desde entonces, tras conocer el día a día de los voluntarios de AEA y participar en la labor de ayuda para con los más necesitados, Ximelis forma parte de esta asociación.
AEA Solidaria ha ampliado su radio de acción hasta Santa Cruz de la Sierra, Bolivia, en el cual tienen un orfanato que alberga 107 niños que no tienen sus necesidades cubiertas.
Para AEA Solidria la principal fuente de ingresos son los «Desayunos solidarios» en los cuales también se sortean entradas para conciertos, cenas (donadas por restaurantes). Otra fuente son las donaciones de particulares que conocen y creen en la labor de esta asociación. También es posible apadrinar niños en Santa Cruz de la Sierra
